El casi “todo Lugo” respondió a la invitación que la empresa del “Torre de Núñez” hizo para conmemorar el 25 aniversario de la puesta en marcha de este complejo hotelero. Estuvieron presentes todas las primeras autoridades a excepción del titular de la Diputación que “yace en el lecho del dolor”. No faltaron clientes, amigos y empresarios de hostelería como los directivos del “Gran Hotel Lugo” y del “Méndez Núñez”. El Presidente de la Asociación de Hostelería, que se ha dejado melena, me cuenta “vengo de una reunión de la Fundación CEL y Guillermo Sánchez Vilariño ha dimitido como Presidente”. El Alcalde pronuncia unas palabras muy cariñosas para la familia Núñez Torre y “reprocha” a Ana Núñez su breve paso por la política como concejala del PP:”ha sido un pecado venial del que ahora te absuelvo”. Hablo con Mario, el hombre de confianza del Obispo Fray José,que organiza la toma de posesión del nuevo Prelado “contamos que vengan de fuera unas 10.000 personas; hay anunciadas excursiones hasta del extranjero”. En las palabras que pronuncia en representación de la empresa, Ana Núñez informa de que en los próximos meses llevarán a cabo obras para mejorar las instalaciones del hotel “queremos, incluso, llegar a las cuatro estrellas”.
En todas estas celebraciones no pueden faltar las copas y los pinchos. En este caso han sido especialmente generosos en cantidad y calidad.
Ahora, a por el 50 aniversario. Y que todos lo veamos.

Dejando a un lado las propinas de un euro y el conejo como base de nuestra alimentación, sirvan estos datos como ejemplo de lo que se han disparado los precios desde no hace mucho
Una barra de pan de medio kilo.- Antes 115 pesetas. Ahora 225.
Uvas.- Antes poco más de 100 pesetas kilo. Ahora más de 300 pesetas y en algunos casos hasta 650.
Gasoil para la calefacción.- No quiero ni pensarlo, pero en pocos años ha triplicado el precio.
Minibombillas para el árbol de Navidad, en los chinos.- El pasado año 6 euros. Las mismas, este año, 9 euros.
No sigo, porque me dan escalofríos. Y si eso me pasa a mí ¿qué no ocurrirá con los mileuristas con familia, que son muchos?

La última: llego a casa y me encuentro el árbol típico de estas fiestas tirado en el suelo y hecho un desastre. Me pasé horas arreglándolo y… Miro para Bonifacio y pone cara de “yo no fui”.

Esta entrada se publicó el Miércoles, 19 de Diciembre , 2007 a las 0:00 am y está clasificada en General. Puedes seguir las respuestas a través de el feed RSS 2.0. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu sitio.