Las noticias, en la panadería
Viernes, 3 de Julio, 2009DURANTE muchos años hice en la radio un magazine que se iniciaba a las doce del mediodía y se prolongaba hasta las 13,30 horas. Compartía todo con Teresa Castro que media hora antes de iniciarse la salida a antena me preguntaba:
-¿Qué tenemos para hoy?
La respuesta era siempre la misma:
- Voy a comprar el pan y a la vuelta hablamos.
Regresaba de la compra alrededor de las doce menos diez y me traía temas suficientes para informar y entretener a una audiencia numerosa y fiel.
Las noticias estaban en la cola de la panadería, en la zona donde aparcaba el coche o en el quiosco en el que compraba la prensa. Las noticias estaban en la calle más que en el Ayuntamiento, en la Diputación o en cualquier otro sitio más o menos oficial.
POR si me quedaba alguna duda, ayer jueves, en poco más de dos horas, conseguí material creo que interesante para ocupar todo el blog de hoy. Lean:
19,45 horas.- Después de hablar por teléfono con uno de los habituales comentaristas de este blog me arreglo para acudir a un acto cultural.
20,10 horas.- Llego a la sala de exposiciones de Caixa Galicia. Ya ha comenzado el acto inaugural de la exposición de fotografías de la artista americana Ruth Matilda, realizadas en Galicia entre 1924 y 1926. Cuando entro en la sala hace un calor fuera de lo normal. En la presidencia, impecablemente trajeados y encorbatados están el Presidente de Caixa Galicia, el Director General, el Alcalde de Lugo, el Comisario americano y un señor que no conozco, que habla de la muestra y que está en mangas de camisa. Pienso si debido al calor ha iniciado hace rato un striptease. Luego me entero que es el comisario gallego, el historiador Miguel Ángel Seijas.
20,30 horas.- Hecho un vistazo a las 164 fotografías y veo un par de ellas de Lugo. Se ve una Galicia pobre y abandonada. Técnicamente y artísticamente el trabajo es irreprochable, pero tengo que decir que en el Archivo Histórico de Lugo hay más de 5.000 imágenes de la capital y de la provincia que nada tienen que envidiar, al contrario, a estas. Sus autores los mejores fotógrafos lucenses de finales del XIX y de todo el XX. Con algunas de esas fotografías, no tratadas digitalmente, organicé hace unos 15 años una exposición de gran éxito en los soportales del Ayuntamiento.
20,40 horas.- Localizo en una vitrina una curiosa factura abonada por Ruth Matilda que se alojó en el Hotel Méndez Núñez el 27 de mayo de 1925. Se especifica:
1) Planchado y lavado de ropa, 7,60 pesetas.
2) Un día de hospedaje y almuerzo, 30 pesetas.
3) Total, 37,60 pesetas.
En la factura, debajo del nombre del hotel, queda claro quiénes son los propietarios: “Viuda e hijos de Francisco García Sobrino”.
Como Maide, la propietaria actual del Méndez, está en la exposición la acompaño para enseñarle el curioso documento.
20,50 horas.- Como es jueves, hay concierto de la Banda Municipal en la Plaza de España; pero no en el templete sino en el paseo, al lado del Café Centro; algunos extranjeros escuchando. La Banda está diezmada con sólo 21 músicos y un cupo mínimo de mujeres: tres chicas que tocan clarinete, flauta travesera y fagot respectivamente. No se extrañen de que Bibiana Aído se declare en huelga de hambre mientras el Sr. Orozco no lleve lo de la paridad a la Banda Municipal.
21,00 horas.- En los jardines de la Diputación Provincial, controlados por la Vicepresidencia Primera, espectáculo del proyecto “Cultura Aberta”. El grupo “Ruso Negro” presenta “Fratelli Negroni, Swing e mentiras”. Humor y canciones italianas de antes. Hay bastante público, unas 300 personas. Me gustó y al público también. Allí me encuentro con M. (no pongo el nombre porque no sé si a él le gustará) un viejo amigo argentino que ha regresado el miércoles de su tierra; quedamos en hablar otro día, pero me adelante “mire, Paco, Buenos Aires ya no es lo que era; aquello no está bien”.
22,10 horas.- En la Plaza de España me encuentro a un grupo de directivos del Círculo con sus esposas. Me invitan a cenar, pero les explico que debo ir a casa para darle el pienso a Bonifacio. Aprovecho para que el Presidente, Jesús López, me asegure que las obras que está financiando la Xunta en la parte del edificio más cercana a la muralla estarán terminadas a mediados de septiembre y no perturbarán las actividades culturales y lúdicas de la casa. Me entero de más cosas del Círculo, pero lo contaré otro día.
22,30 horas.- Llego a casa y cuando estoy echando el pienso de Bonifacio en un recipiente suena el teléfono y otros amigos me invitan a cenar; además me vienen a buscar en su coche. Total, que después de atender al colega me vuelvo a la calle y gracias a eso conozco que ayer se reunieron en una comida de trabajo el Presidente de la CEL y el Presidente de la Cámara de Comercio. Tradicionalmente las relaciones entre las dos asociaciones no han sido muy fluidas. Ahora parece que sí y que serán mejores en el futuro. También me invitan a una fiesta que tendrá lugar el fin de semana en casa de una familia amiga. Habrá algo muy interesante, pero no puedo adelantarlo. Lo contaré a toro pasado y explicaré porqué ahora no puedo; y ustedes lo entenderán.
3,40 horas del viernes.- Acabo esta bitácora y me voy a dar un paseo con Bonifacio. El ordenador se ha puesto un poco loco y sin que sepa el motivo el interlineado ha cambiado. En la calle, como en la cola de la panadería, hay noticias.